Después de medio siglo en tinieblas, luz eléctrica llega a Varelo

Una obra que permanecerá en la memoria de los habitantes de esta vereda, ubicada al noroccidente de El Banco, Magdalena.

Comunidad de Varelo trabajando por la buena causa.

Las calles desoladas y oscuras de la vereda Varelo, solo serán cuestión del pasado, pues hoy, después de más de 50 años sin fluido eléctrico, sus habitantes podrán disfrutar de este servicio fundamental para el diario vivir. La iniciativa de llevar acabo esta obra, estuvo a cargo del líder Víctor Rangel López y los aportes significativos de Ronald Flórez Sierra, sumados a la voluntad y colaboración de la comunidad.

Los postes de madera y concreto, y las redes eléctricas que permitieron llevar el fluido eléctrico a Varelo, fueron entregados por Víctor Rangel. Por su parte Ronald Flórez hizo entrega de las lámparas, mientras que hombres y mujeres de la vereda, entregaron su mayor esfuerzo para cavar la tierra y plantar uno a uno los postes.

Karen Alvarado, fue una de las personas que contribuyó con la jornada y se mostró complacida por los resultados que se obtuvieron. “Primero que todo le doy gracias a Dios y al Doctor Víctor Rangel, que aportó un granito de arena. Hoy en día ya tenemos la luz, con esfuerzo lo logramos. Me da tanta alegría porque la comunidad trabajó unida por un mismo propósito. Esto quedará en nuestro corazones”, expresó Karen Alvarado.

Víctor Rangel había prometido con anterioridad estos aportes, los cuales la comunidad de Varelo recibió con beneplácito. “Nos hicimos el compromiso de trabajar unidos para llevar la luz eléctrica a Varelo, y hoy gracias a Dios, a la unión y trabajo de la comunidad, es una realidad. Este es el inicio de muchas obras que más adelante desarrollaremos por esta parte del municipio, con el fin de satisfacer las principales necesidades de la gente. Un pueblo sin luz eléctrica, es sinónimo de subdesarrollo y desde ya estamos apuntándole a un orden social sin fragmentación, ni centralización”, puntualizó Rangel López.

La vereda Varelo se encuentra ubicada entre los corregimientos de Menchiquejo y Caño de Palma, jurisdicción del municipio de El Banco. Cuenta con 200 habitantes aproximadamente, los cuales subsisten de la pesca y el campo. Ha sufrido del abandono gubernamental por muchos años, lo cual viene afectando el crecimiento y el desarrollo de esta parte de la región del sur del Magdalena, en donde los habitantes de las zonas rurales padecen de pobreza absoluta y falta de oportunidades.